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Irreflexiones #1: ¿Más vale blogger desconocido que bitácora cerrada?

Autor : Ricardo Galvez
Publicado el 20/07/2004 - 11:26 A.M.

Lectores y comentarios. Dos palabras que, para muchos bloggers, define la -tan ansiada- popularidad de una bitácora. Es verdad que no poseo una larga vida bloggeril -apenas algo mas de un año- y, como muchos, he visitado y leído cientos de bitacoras tratando de hallar la causa -aquella suerte de "5 claves del exito bloggeril"- que las hace populares. Muchas entradas se han dedicado a este tema: tips, consejos y una fila de etceteras que no mencionaré, ya que el proposito de esta entrada es tratar, en forma genérica, en lo que -posiblemente- pueda acarrear a un blogger la popularidad alcanzada.
Al igual que en el mundo real, la popularidad trae consigo aspectos ventajosos y otros no tanto. Este convertirse en una "persona pública virtual" hará que su voz sea escuchada con mayor atención y, dependiendo de la orientación dada a la bitácora, generar una corriente de opinión. Merece atención, igualmente, el hecho que "personas públicas" deseen -y logren- volcar esa popularidad en el mundo virtual. Periodistas y políticos han hallado en las bitácoras otro medio -quizás no tan masivo pero si mucho más interactivo- de comunicarse y de llegar a su público objetivo. Realmente fantástico.
La popularidad o el éxito alcanzados conlleva en sí cierta responsabilidad: la de seguir ofreciendo contenidos con la misma regularidad y calidad. Ello, si no es tomado con tranquilidad, puede inducir al blogger a someterse a una situación de "presión" o "estrés" que puede transformar aquello que, en un principio, consideraba atractivo por una actividad insufrible. Ante tal perspectiva, muchos bloggers optan por cerrar sus bitácoras definitivamente o, en el mejor de los casos, abrir una nueva bajo otra identidad.
Es probable que el panorama expuesto pueda parecer sobredimensionado o exagerado pero creo que es válido en la medidad que sirva como ejercicio ilustrativo. Lograr el equilibrio ente la popularidad y la responsabilidad adquirida no es sencillo y dependerá en gran medida, y esto es lo paradójico, que el blogger se desentienda, en gran parte, de dicho compromiso tácito.